El tratamiento del Trastorno de Ansiedad Generalizada comprende la terapia farmacológica, el apoyo psicoterapéutico y la educación al paciente y familiares (psicoeducación).
1. Tratamiento farmacológico
Los estudios científicos muestran que los siguientes fármacos han demostrado ser efectivos en el Trastorno de Ansiedad Generalizada:
• Benzodiazepinas: comúnmente llamados ansiolíticos (por ejemplo el alprazolam).
• Buspirona
• Antidepresivos
La elección por parte del psiquiatra del fármaco indicado es individualizada y dependerá de múltiples factores clínicos.
2. Psicoterapia
El enfoque psicoterapéutico que actualmente posee mayor evidencia de efectividad en el tratamiento del Trastorno de Ansiedad Generalizada es la psicoterapia Cognitivo Conductual.
Ésta utiliza técnicas de entrenamiento en el manejo de la ansiedad, exposición progresiva a situaciones angustiantes, relajación y reestructuración cognitiva (modificación de los mecanismos cognitivos que perpetúan la enfermedad).
3. Psicoeducación
Algunas medidas simples que le ayudarán a optimizar el resultado de su tratamiento
• Procure conocer su enfermedad: ya que el Trastorno de Ansiedad Generalizada suele ser una condición que tiende a reaparecer, es esencial que usted aprenda sobre la enfermedad; de esta forma podrá colaborar mejor con el éxito del tratamiento.
• Siga estos consejos generales para disminuir la ansiedad: estos consejos son válidos tanto para pacientes con un Trastorno de Ansiedad Generalizada, como para todas las personas que sientan que han aumentado sus niveles de ansiedad:
o Realice Ejercicio Físico: inicialmente practíquelo en forma moderada; para personas sobre 30 años sedentarias se recomiendan caminatas, natación y ciclismo.
o Normalice Horarios y Hábitos de Alimentación: mantenga una alimentación balanceada, respete los horarios de comidas y disponga del tiempo y la tranquilidad necesarios para cada una de ellas.
o Normalice Hábitos y Horarios de Sueño: respete los horarios de sueño, practique hábitos de higiene del sueño (ver Guía de Higiene del Sueño).
o Planifique las Actividades Diarias: programe las actividades para que no se acumulen, establezca prioridades, planifique descansos durante el día, adquiera la capacidad de rechazar los compromisos indeseables o que no podrá cumplir, deje tiempo para realizar actividades placenteras.
o Racionalice la Actividad Laboral: no prolongue las jornadas de trabajo, delegue funciones, no asuma más tareas de las que es posible cumplir.
o Respete los Horarios de Ocio: defina momentos de descanso y recreación en la rutina diaria, individuales y junto a su familia; tome regularmente vacaciones.
o Practique Técnicas de Relajación: según sus preferencias personales puede inclinarse por alguna disciplina oriental (yoga, tai-chi, etc.) o aprender técnicas específicas junto a su médico o terapeuta
o Aprenda a manejar el estrés: recuerde que circunstancias que normalmente desequilibrarían emocionalmente a cualquiera, a los pacientes con Trastorno de Ansiedad Generalizada les afectarán mucho más.
La psicoterapia es aquí fundamental, no sólo para identificar posibles factores estresantes, sino para reducirlos en la medida de lo posible; asimismo potencia las habilidades personales para afrontar conflictos y le enseña a manejar la angustia.
• Mantenga su tratamiento: probablemente existirán muchos momentos en los que usted estará tentado de dejar de tomar sus fármacos (porque está molesto con los efectos secundarios, porque éstos son muy caros o porque lleva mucho tiempo sintiéndose bien). Sin embargo, si usted detiene su tratamiento antes de tiempo, probablemente tendrá una recaída.
Precauciones: las únicas veces que usted debe considerar seriamente la posibilidad dejar de suspender su tratamiento, será cuando desee quedar embarazada o cuando tenga un problema médico que pueda provocar que los fármacos resulten riesgosos. Consulte a su médico: si debe consumir fármacos por otras patologías, ya que pueden existir interacciones con su tratamiento.
• Aprenda a detectar precozmente las descompensaciones de su enfermedad: una vez resuelto el episodio agudo es importante que reporte siempre en forma inmediata los pequeños aumentos de sintomatología ansiosa a su doctor. Esto permitirá que se realicen las modificaciones oportunas a su tratamiento, evitando así una recaída.
• No utilice alcohol o drogas ilícitas: estos productos químicos pueden comprometer gravemente su salud al interactuar con el tratamiento farmacológico que usted recibe.
¿Cómo pueden colaborar con el tratamiento la familia y los amigos?
• Infórmese acerca de la enfermedad del paciente: sus causas, síntomas y tratamiento, así comprenderá mejor sus quejas y conductas, y podrá apoyarlo de forma más adecuada.
• Aprenda a reconocerlos signos iniciales de una recaída: ayúdelo a detectar cualquier aumento de la ansiedad, de forma de procurar una visita precoz al médico y una modificación del tratamiento oportuna, evitando así una recaída grave y todo lo que ésta conllevaría (ausentismo laboral, sufrimiento del paciente y seres queridos, etc.).
• Motive al paciente a mantener el tratamiento: tanto los controles médicos como el tratamiento farmacológico y psicológico; especialmente en la Terapia Cognitivo Conductual, facilite la realización de las tareas indicadas regularmente al paciente.
• Sea empático: intente ser tan cariñoso y paciente como sea posible, ya que ésta es la mejor manera de ayudar a su ser querido. Pedir a alguien que simplemente “detenga sus preocupaciones con fuerza de voluntad”, no ayuda; y sólo produce rabia, más ansiedad y frustración en la persona, ya que no puede lograrlo, porque se trata de una enfermedad, no de una conducta voluntaria. En cambio, hay que alabar cualquier esfuerzo exitoso de progreso en el tratamiento.
Autores: Dra Claudia Barrera Renault y Dr. Jorge Ochoa Muñoz.
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